Isabel Pantoja ha experimentado un año complicado en 2024. La tonadillera ha tenido que enfrentarse a múltiples problemas en distintos ámbitos.
Desde su mudanza a Madrid a los problemas con su hermano Agustín,
pasando por el distanciamiento público de Isa Pantoja tras desvelarse el controvertido incidente de la manguera y el corte de pelo.
Un año en el que, además, se han cumplido cuatro décadas de la muerte de su exmarido Paquirri.
Sin embargo, uno de los momentos culminantes del calendario se produjo este pasado jueves, con su esperado concierto en el festival Starlite Christmas de Madrid. A pesar del ritmo lento de entradas notificado en las semanas previas, la andaluza lo dejó todo ante un público entregado, no sin pasar por alto sus problemas personales. A lo largo de tres horas de actuación, la cantante se dio un baño de aplausos entre sus seguidores más fervientes.
Aun así, los titulares de distintos medios han cuestionado la capacidad del recinto, distintas fuentes reduciendo el aforo hasta el 30%. De los 7.000 asientos habilitados en el recinto de IFEMA, solo 2.500 habrían sido ocupados en el momento de empezar, llegando al extremo de entradas regaladas. “Me llegaron muchos mensajes de amigos regalándome entradas para que viniera a verla al concierto”, explicaba en Vamos a ver la reportera Nuria Chavero.
“No es cierto que se vendió el 30% del aforo, dicen que se vendió un 65%”, aportaba Marta López tras un comunicado de los organizadores, añadiendo sus palabras al baile de cifras. TardeAR, el magacín vespertino de Telecinco presentado por Frank Blanco durante estas fiestas, ha añadido que la ocupación estaría en torno al 60% y que las filas traseras se habrían quedado vacías. Por su parte, el director de Lecturas Luis Pliego aseguró que había sido vetado.