Rosalía, Jenna Ortega o Chappell Roan son algunos de los nombres que no han cedido a las peticiones de los paparazzi en los eventos de ‘red carpet’, una actitud diferente de la de otras colegas de profesión pertenecientes a generaciones anteriores
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París, febrero de 2024, semana de la moda. Rosalía acude al desfile de Dior ataviada con un look negro rematado por unas gafas de sol del mismo color. Los fotógrafos allí congregados comienzan su oleada de flashes y en un momento dado piden a la cantante que se quite las gafas. Rosalía responde, en inglés, con su expresividad característica: “No, no, el look es con las gafas”. La espontánea reacción de la catalana se viraliza en redes sociales y da pie a un debate entre quienes defienden a los fotógrafos y quienes están con Rosalía. La anécdota puede parecer curiosa y seguramente esa respuesta de la creadora de Motomami tenía mucho que ver con responsabilidades contractuales con la firma, pero además evidencia otra cosa: un cambio de actitud en la alfombra roja y a la hora de fijar límites, en este caso a los fotógrafos. Y el de Rosalía no es el único ejemplo que refleja cómo las generaciones más jóvenes se comportan de otra manera en la red carpet.
Pascal Le Segretain//Getty Images
Cuando Rosalía acudió al desfile de Dior el pasado febrero, los fotógrafos le pidieron que se quitara las gafas para las fotos, ella se negó y su respuesta se viralizó en la red.
Jenna Ortega y Winona Ryder: dos generaciones, una actitud
La actriz Jenna Ortega ejemplificó a la perfección ese cambio de actitud que implica no ceder siempre a las peticiones de los fotógrafos. Todo ocurrió en la última edición del Festival de Venecia, celebrada el pasado septiembre. La intérprete acudió para estrenar la secuela de Beetlejuice, el icónico film dirigido por Tim Burton donde compartió pantalla con, entre otras celebridades, Winona Ryder. En un momento dado, Jenna Ortega estaba posando junto a las actrices Catherine O’Hara y Winona Ryder cuando los paparazzi pidieron a estas dos últimas que se quitaran las gafas de sol que llevaban puestas. Ortega percibió que Ryder titubeaba y no estaba muy convencida de quitárselas. “No tienes que hacerlo” le dice la joven intérprete a Ryder, que finalmente se dejó las gafas puestas. El vídeo dio la vuelta al mundo y muchos aplaudieron la decisión de Winona Ryder de no ceder a la presión de los fotógrafos y optar por hacer aquello con lo que se sentía más cómoda.
Otro de los nombres más potentes de la música actual, Chappell Roan, se ha posicionado recientemente respecto a cómo dentro de la maquinaria de la alfombra roja hay normalizados unos comportamientos que poco tienen de normales. La artista vivió un incidente con un fotógrafo en los últimos MTV Video Music Awards. Roan confrontó a uno de los papparazi que cubrió al evento ya que, según su versión, el hombre había tratado de manera poco respetuosa a la cantante. El encontronazo se produjo cuando el fotógrafo espetó a la cantante que se callara. “¡Cállate tú la **** boca. No yo, *****!”, respondió ella. En otra ocasión, se dirigió al mismo fotógrafo, que identificó en un evento posterior, para exigirle que se disculpara con ella. En una entrevista concedida a The Guardian se justificó al respecto y aseguró que “algunas chicas llevan tanto tiempo en esto que están acostumbradas, pero no soy esa chica. No voy a ser dulce con un hombre que está gritando que me calle”. Tampoco se calló la actriz Hannah Waddingham, conocida por su participación en Juego de tronos, cuando un fotógrafo le pidió enseñar pierna mientras posaba en un photocall de unos famosos premios celebrados en Londres en abril de 2024. “Eso nunca se lo dirías a un hombre. No seas imbécil y no me vuelvas a pedir que enseñe la pierna”, le espetó. La intérprete, que no pertenece a la GenZ, es otra prueba más de cómo poco a poco se está dejando de hacer oídos sordos a esos comentarios inapropiados que llevan toda la vida escuchándose en la red carpet.
Marina Ortiz, periodista y tiktoker especializada en cultura pop identifica este cambio de actitud en la alfombra roja con el auge de las redes sociales: “Con las redes sociales como fuente de apoyo para los famosos, ya no sienten tanta dependencia de los medios de comunicación. Por lo tanto, el aparecer en las revistas se ha convertido en algo secundario y de lo que no depende la fama o el éxito”, reflexiona. Y añade que “Todos somos ahora más conscientes de la importancia de la salud mental y también luchamos más por nuestro propio bienestar. Aún así, todavía hay mucho camino por recorrer y se aprecia con la reacción que ha tenido el público a estos comportamientos. También cómo otros famosos han apoyado a personajes como Chappell Roan, que habla de la presión no solo de los fotógrafos sino también de los fans, que es el siguiente paso a estudiar y cuestionar”.
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Contra un comentario machista también se relevó la actriz española Mirela Balic durante la premiere de la película Disco, Ibiza, Locomía en mayo del pasado año. La intérprete asistió al estreno con un look que dejaba al descubierto su pecho izquierdo, cubierto con su mano mientras posaba en la alfombra roja. A uno de los fotógrafos le pareció gracioso pedir “un saludo con la mano izquierda”, un comentario que Balic condenó en el momento y más tarde en su perfil de Instagram. En un story donde se veía a la actriz en la alfombra roja añadió el siguiente mensaje: “Un saludo con la mano izquierda. Esta ha sido la agresión que he vivido en el photocall de Locomía por parte de un señoro del pleistoceno seguido de “tú te crees que puedes posar así y demás insultos. Y no. (…)”, escribió en redes. Sin duda, algo está cambiando.