La tenista estadounidense fue clara con su elección.
A lo largo de su carrera, Serena Williams se consolidó como una de las figuras más trascendentes del tenis mundial. Con 23 títulos de Grand Slam y cuatro medallas de oro olímpicas, la estadounidense marcó una era en el deporte, situándose a la altura de los grandes del circuito masculino como Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic.
Su legado la convirtió en un referente sin distinción de género, y en varias oportunidades ha sido comparada con los tres miembros del llamado Big Three. A pesar de que el serbio es el máximo ganador de torneos de Grand Slam con 24 conquistas, la menor de las Williams dejó en claro a quién considera el mejor de todos.
Fue en 2021, durante una conferencia de prensa en el Abierto de Emilia-Romagna, donde Serena expresó su admiración por Roger Federer. La estadounidense no solo destacó sus logros, sino que lo calificó como el jugador que cambió el tenis moderno con su estilo de juego elegante y depurado.
“Creo que dos palabras lo resumen: Roger Federer”, afirmó con contundencia. A pesar de que Nadal y Djokovic lograron superar al suizo en cantidad de títulos, Williams no dudó en señalarlo como el mayor referente del tenis por su impacto en el juego.
La admiración de Serena Williams por Federer
Serena Williams ha sido una fanática confesa del suizo, y su admiración va más allá de los números y títulos. “Él es solo una sinopsis de grandeza y clase, sorprendente. Realmente cambió el juego. Ves jugadores jugando como él, moviéndose como él, practicando sus técnicas. El tipo es un genio”, sostuvo la extenista, dejando en claro su posición.
Incluso llegó a bromear con la posibilidad de haber tenido su mismo estilo de juego: “Realmente siento que es el mejor jugador. No puede ser que no te guste ese chico. Su juego es fantástico. Si solo pudiera jugar como él”, agregó con admiración.
Por otro lado, Federer también ha reconocido el impacto de Serena en la historia del tenis. En una entrevista con el Wall Street Journal en 2018, el suizo llegó a considerarla como la mejor tenista de todos los tiempos, sin importar el género. “Se convirtió en una de las más grandes, si no la mejor. La mejor en general”, afirmó en ese entonces.
