Nuestra actriz más internacional, la única con una estatuilla, se mantiene en la élite del cine mundial y será una de las copresentadoras de la gala de este domingo
“De Penélope Cruz destacaría su luz, su magia, su inmenso talento y, de un modo muy particular, su fantástica capacidad para entregarse a su familia y, al mismo tiempo, no apearse de la élite del cine mundial desde hace 25 años”. La definición que el escritor y cineasta aragonés Luis Alegre nos regala de la actriz española más internacional es también la de un “íntimo desde que ella tenía 17 años” y se conocieron en el desierto de Los Monegros durante el rodaje de Jamón, jamón, de Bigas Luna (1992). Allí estaba también Javier Bardem. Allí empezó todo. Porque quién le iba a decir a aquella jovencita la trayectoria y el palmarés que lograría en el cine, incluido el Oscar, en 2009, a la mejor actriz de reparto por Vicky Cristina Barcelona. De hecho, es la única intérprete española que lo tiene. Y quién le iba a decir también que aquella amistad con Bardem acabaría, tras reencontrarse en la oscarizada cinta de Woody Allen, en una historia de amor muy asentada y con dos hijos, Leo y Luna, como pilares.
Este domingo 2 de marzo (madrugada del 3 en España) la veremos subir al Teatro Dolby de Los Ángeles para entregar uno de los Oscar. Será una de las presentadoras de la gala conducida por Conan O’Brien. El escenario no es nuevo para ella, nominada en otras tres ocasiones a un premio de la Academia de Cine de Hollywood: en 2007 por Volver, en 2010 por Nine y en 2022 por Madres paralelas. Nunca olvidaremos ese “¡Pedroooo!” suyo cuando en el año 2000 leyó, junto a Antonio Banderas, el nombre de Almodóvar para el Oscar a mejor película extranjera por Todo sobre mi madre. En 2007, junto a Hugh Jackman, entregó el Oscar a mejor banda sonora original a Gustavo Santaolalla por Babel. En 2013, el de mejor película de habla no inglesa, junto a Salma Hayek, a Amour, de Michael Haneke. En 2016, el de mejor película de animación a Inside Out junto a John Travolta. En 2018, el de mejor documental a Icarus. Y en 2020 a Bong Joon-ho por Parásitos como mejor película extranjera. Veremos quién es esta vez su acompañante y el premio que anuncia.
Algo debe tener Penélope cuando gusta tanto
El sueño de que en este 2025 una española pudiera entregar a otra, Karla Sofía Gascón (Alcobendas, 1972), el Oscar a mejor actriz protagonista (por la francesa Emilia Pérez) amenaza con esfumarse por sus tuits tachados de misóginos y racistas. Pero para el recuerdo nos queda el momento en el que Penélope Cruz (Alcobendas, 1974) subió a recoger su estatuilla y se escuchó desde el público un sonoro “¡Viva la madre que te parió!”. El ‘grito de euforia’ por el que la premiada casi pierde el hilo mientras daba las gracias delante del micrófono solo podía proceder de nuestro amigo Luis Alegre, quien quiso así homenajear a la madre de la actriz.
La andaluza Encarnación Sánchez es un referente vital para Penélope. Junto a su marido Eduardo Cruz, fallecido en 2015 y de quien se divorció en 1999, pusieron el nombre de una de sus canciones favoritas, Penélope, de Serrat, a su primera hija. Después llegaron Mónica y Eduardo. Encarnación regentaba una peluquería en Alcobendas mientras su marido trabajaba en un concesionario de automóviles. Una familia trabajadora, de barrio, que ha dejado un profundo poso en la artista.
Esos valores enamoraron a Javier Bardem, quien, al recoger el Premio Donostia, le dio las gracias a su mujer por “el ser humano que eres y por cómo te responsabilizas de la vida de tus hijos, de tu madre, de tus amigos, de la vida del arte y de la vida de otros por los que sufres y a los que cuidas”. Algo debe tener Penélope cuando gusta tanto. Y no digamos en su profesión, con sus más de 30 premios y 56 nominaciones. Este año, por ejemplo, tras Ferrari, estrenará The bride, un remake de La novia de Frankenstein, junto a Christian Bale, Jessie Buckley, Peter Sarsgaard y Annette Benning, y protagonizará Los días del abandono, de Isabel Coixet. Entre sus planes está, además, la dirección de un documental ‘muy personal’ producido por su propia compañía, Moonlyon (creada en honor a sus hijos) del que nada se sabe.
Penélope se define como feminista, preocupada por la sostenibilidad y el medio ambiente y, según dice, creyente a su manera. Es justo recordar la donación de material sanitario que el matrimonio realizó durante el covid al hospital de La Paz de Madrid: 100.000 guantes y 20.000 mascarillas. También se describe como responsable con su trabajo. Para prueba, los directores con los que ha grabado, la admiración de sus compañeros o que hasta el MOMA de Nueva York le organizara un homenaje en 2021 a su trayectoria. Desfilar por la próxima alfombra roja de los Oscar será sólo un punto y seguido para esta estrella.