Cuando hablamos de Thalía, hablamos de una mujer cuyo talento artístico trasciende más allá del ámbito musical, abarcando incluso el arte del estilismo. Desde sus inicios en la banda Timbiriche, ha conquistado el panorama de la moda, que, al igual que sus éxitos musicales, se han convertido en himnos de Latinoamérica. Lo que la cantante luce roba protagonismo y su influencia no conoce límites. Su amor por la moda y la experimentación estilística inspira la respuesta a los looks actuales, convirtiéndola en el referente de estilo por excelencia.
Thalia luce como una sirena con el vestido joya que lució en los Premios lo Nuestro 2025

No es coincidencia que, incluso hoy en día, lo que Thalía lució hace algunos años continúe siendo parte de las sentencias de estilo para los vestidos en tendencia de Primavera-Verano 2025. Fue en el año 2001 cuando la intérprete de Amor a la Mexicana deslumbró en la ciudad de Los Ángeles, California, durante la ceremonia anual de los Grammy, con un vestido de cuello halter, caída asimétrica y un escote de impacto, en un delicioso tono que, hace unas semanas, fue nombrado como la tonalidad del año: mocha mousse.
Los vestidos mocha mousse son tendencia en Primavera-Verano 2025
Cada año, el sistema de clasificación de colores Pantone elige un tono que, durante los siguientes 365 días, se encargará de reflejar el estado de ánimo del momento. En esta ocasión, el color café cálido con matices rojizos, que evoca sutileza, calidad y elegancia, se presenta como la máxima apuesta de estilo. Así, las tendencias de Primavera-Verano 2025 se tiñen de la vaporosidad y la placentera sensación que evoca este tono. Y si realizamos un análisis estilístico de los años 2000 hasta el presente, descubrimos que en el repertorio de la moda de Thalía solo hallaremos propuestas memorables que nos harán desear emular esta temporada.
En una sola temporada, el color mocha mousse protagonizó grandes momentos sobre las pasarelas y demostró que la forma más elegante de llevarlo es en vestidos. Es un tono con un peso visual distintivo que, sin ser sobrio ni exageradamente formal, logra el equilibrio perfecto entre sutileza y sofisticación. Esta mezcla dominó la propuesta de Hermès, que con un vestido corto sin mangas y detalles bordados en relieves, acompañado de unas botas altas a tono, vestir como una experta se vuelve sencillo.