Borja Voces, el rostro confiable del periodismo hispano, acaba de romper su imagen perfecta. Lo que parecía una historia de amor discreta y madura con Pamela Silva terminó convirtiéndose en el escándalo sentimental más incómodo que ha vivido Univisión en años. Y en el centro de la tormenta: Clarisa Molina.
Pamela Silva, madre ejemplar, profesional intachable y figura respetada del canal, había construido con Borja un vínculo que, para muchos, ya rozaba lo familiar. Incluso lo llamaba “su esposo” en conversaciones íntimas. Ella hablaba de formar una familia, de darle un hermanito a su hijo Ford. Mientras tanto, Borja compartía cenas, bromas y miradas cargadas de complicidad con otra mujer: Clarisa Molina.
¿Coincidencia? ¿Doble vida emocional? ¿O simplemente una historia mal contada?
Lo cierto es que Clarisa y Borja comenzaron a aparecer juntos cada vez más. Y lo que parecía un “compañerismo” televisivo, rápidamente se convirtió en una relación que no podía ocultarse más. Viajes juntos, joyerías en Coral Gables, encuentros públicos y… una videollamada mal contestada que lo arruinó todo. Pamela descubrió por accidente lo que el periodista había escondido: el romance ya no era un rumor, era una realidad. Su realidad.
Pamela se quebró. Se encerró en su camerino, canceló entrevistas y pidió ser reubicada para no compartir espacio con Borja. En redes, sin dar nombres, lanzó frases como “La vida te quita lo que no necesitas” o “Nunca ruegues por amor. El amor real no duele”, desatando una ola de apoyo que convirtió su aparente silencio en una poderosa acusación.
Pero la historia no se detuvo ahí. Clarisa, al enterarse de la profundidad del vínculo entre Borja y Pamela, también estalló. Abandonó un set antes de salir al aire tras una fuerte discusión con él. La tensión era tan alta que se rumoreó la intervención directa de altos ejecutivos de Univisión. Incluso se especula que uno de los tres —Borja, Pamela o Clarisa— podría estar en la cuerda floja.
Y por si fuera poco, una figura clave de la cadena estaría presionando para que el escándalo no manche la imagen pública de Univisión. ¿Se acerca un despido silencioso?
Borja, mientras tanto, planea llevar a Clarisa a España para presentarla oficialmente a su familia. ¿Propuesta de matrimonio? ¿Una huida de la polémica? ¿O simplemente una confirmación de que la historia con Pamela nunca fue tan “oficial” como todos pensaban?
El silencio de Pamela es ensordecedor. Su elegancia frente a la exposición pública la ha convertido en la verdadera protagonista de esta historia. ¿Será también la ganadora moral?