Entre cámaras y abogados: el movimiento inesperado de Jorge Benavides que sacudió a la televisión peruana
En el mundo del espectáculo, las tensiones suelen resolverse entre bambalinas, lejos de las cámaras.
Pero esta vez, el conflicto salió a la luz con la fuerza de un rayo.
Jorge Benavides, uno de los nombres más potentes de la televisión peruana, decidió dar un paso que pocos se atreverían: enviar una carta notarial dirigida a Ernesto Pimentel y a América TV, con Dayanita como el centro de la disputa.
Lo que parecía un simple roce profesional se transformó en un acto legal que amenaza con destapar secretos, rivalidades y verdades incómodas que muchos preferirían mantener ocultas.
La noticia cayó como una bomba en la industria televisiva.
Jorge Benavides, creador y líder de programas de alto rating, no solo mostró su incomodidad, sino que formalizó su posición con un documento legal.
La carta notarial, enviada directamente a Ernesto Pimentel y a la dirección de América TV, pone en evidencia un conflicto que venía gestándose desde hace semanas y cuyo epicentro es Dayanita, figura popular en ambos universos televisivos.
Fuentes cercanas aseguran que el malestar surgió por la participación de Dayanita en un proyecto paralelo, presuntamente sin la autorización o coordinación debida con la producción de Benavides.
Este hecho habría sido interpretado como una falta de respeto a acuerdos previos, encendiendo las alarmas en el equipo del comediante.
Ernesto Pimentel, por su parte, no ha emitido declaraciones contundentes, aunque en su entorno se comenta que la situación tomó por sorpresa a su producción.
América TV, atrapada en medio de dos de sus figuras más importantes, enfrenta ahora la tarea delicada de mediar entre ambas partes sin que el conflicto escale públicamente.
En redes sociales, el tema se volvió tendencia.
Algunos seguidores de Benavides respaldan su derecho a defender sus proyectos y su equipo, mientras que otros acusan al comediante de exagerar una situación que podría haberse resuelto de manera interna.
En el caso de Dayanita, las opiniones también están divididas: unos la ven como víctima de una disputa de egos, y otros, como responsable de no manejar con cuidado sus compromisos profesionales.
La carta notarial, aunque no se ha hecho pública en su totalidad, podría contener cláusulas contractuales y advertencias legales que, de revelarse, aportarían más claridad —y quizá más tensión— al caso.
Por ahora, lo único seguro es que esta confrontación ha dejado en evidencia lo frágil que puede ser la armonía en un medio donde la fama, el orgullo y los intereses comerciales se entrelazan de forma explosiva.