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Esta fue la primera película que la actriz protagonizó junto a su ahora marido, Javier Bardem, cuando ambos estaban empezando en el cine
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Más tarde se convirtieron en pareja y su amor ha sido uno de los protagonistas de esta edición del Festival de San Sebastián
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Javier Bardem hace llorar a Penélope Cruz en el Festival de San Sebastián: “Por el ser humano que eres”
Penélope Cruz y Javier Bardem forman una de las parejas más longevas de la industria del cine. A pesar de que son reacios a compartir su intimidad ya no esconden su amor. Como prueba de esto, el actor hizo brotar las lágrimas de la de Alcobendas cuando se subió al escenario a agradecer el Premio Donostia que recibía esa noche. Y es que los intérpretes se conocen desde hace muchos años, su primera conexión fue a nivel profesional en la película ‘Jamón, jamón’, un film dirigido por Bigas Luna en el que ella solo contaba con 17 años y el con 24.
Penélope Cruz y Javier Bardem en el Festival de San Sebastián | Cordon Press
Fue el propio intérprete el que puso de manifiesto lo importante que fue este rodaje para ambos en una entrevista en Cadena Ser: “Nuestra hija se llama Luna. Por muchas cosas, pero por supuesto también como homenaje a Bigas. No sé que hubiera pasado si esa película no se hubiera hecho a nivel profesional y personal”.
Durante esta primera gran gala del Festival de San Sebastián parece que ha sido ella quien ha querido hacer un tributo público a esta película que ambos rodaron hace 32 años y que fue clave en su historia de amor. Los actores llegaban juntos al ‘photocall’ del festival vasco derrochando complicidad, se han regalado sonrisas y gestos cargados de amor, y entre ellos se ha colado un guiño a la película solo a la vista de los más observadores.
Penélope CruzEuropa Press
La actriz ha optado por un diseño de la firma Chanel, algo habitual en ella, yaque es embajadora de esta casa de moda. En esta ocasión ha elegido un vestido de corte sirena en color blanco confeccionado casi en su totalidad en encaje. La pieza lleva sobre los hombros unas aplicaciones de gasa, también en tono blanco, a modo de tirante y en el medio del pecho un lazo de raso negro coronado por la identificativa camelia de la ´maison’ francesa. A media pierna el encaje se corta con una blonda, también de encaje y desde este punto nace una falda con cola que le cubre los pies.