Hoy por hoy, no podemos negar la fiebre por la inteligencia artificial. Aunque ya existen diversos chatbots, aplicaciones e incluso redes sociales que implementan esta tecnología, el cine puso el tema sobre la mesa desde hace décadas. Y al parecer, ya no estamos tan lejos de sus conceptos.
En el año 2044 la Tierra se ha transformado en un desierto radioactivo que dejó a la humanidad al borde de la extinción con tan solo 21 millones de supervivientes. Jacq Vaucan, un agente de seguros especializado en robótica, se enfrenta a un caso aparentemente rutinario. Su investigación lo llevará a descubrir un caso insólito: los robots han ejecutado una violación a su protocolo de fabricación. Esto es: Autómata.
La mezcla exacta entre Yo, Robot, Blade Runner y Ex Machina
Si bien en 2001 Steven Spielberg estrenó la película A. I. Inteligencia Artificial basada en el cuento Los superjuguetes duran todo el verano, esta obra española toma inspiración de otros exponentes del género. Cada uno con sus diferentes repercusiones en la percepción que se tiene de este tipo de sistema operativo.
En primer lugar, la referencia más clara es el hecho de que dentro de la narrativa de Autómata, podemos encontrar dos leyes aplicadas a los robots. La primera indica que estos no pueden dañar a ningún ser humano, mientras que la segunda ley prohíbe que puedan modificarse entre ellos mismos. Propuesta similar a la establecida por Isaac Asimov.
El giro está en que, contrario a lo que se vio en la adaptación de 2004 protagonizada por Will Smith, aquí la regla que se rompe es la de modificarse hasta el punto de tomar consciencia de su propia existencia. A diferencia de querer destruir a la humanidad como en Terminator, la trama se inclina más a lo presentado por Ex Machina y cómo estos “seres” comienzan a ir más allá de la inteligencia proporcionada por sus creadores.
Escrita y dirigida por Gabe Ibáñez, la propuesta principal de la cinta es cuestionar sobre la mera existencia de las máquinas y el por qué los humanos les brindaron la oportunidad de ser conscientes. ¿Podría considerarse la supervivencia de una nueva inteligencia consciente, creada por los propios humanos, como el próximo paso en la evolución natural de las especies? o bien, ¿les preocupa esta inteligencia y por ello existe el segundo protocolo?
Ahora bien, poco a poco podemos desmenuzar la relación equiparable con Blade Runner. Con Antonio Banderas en el papel de Jacq Vaucan, vemos a nuestro protagonista en este mundo post-apocalíptico-desértico (ahí tal vez una pequeña inspiración de Mad Max) en búsqueda de respuestas. ¿Descubrirá si los androides sueñan con ovejas eléctricas? Sea como fuere, tenemos en pantalla a una nueva versión del legendario Rick Deckard.
Vale la pena mencionar que no le fue bien en cuanto a la recepción por parte de la audiencia. Algunos de los errores que se pueden leer es la inconsistencia del guion que al querer acaparar temas de aquí y de allá, termina por no tomar uno por completo. Sin embargo, es de reconocer el riesgo tomado para presentar en pantalla grande un proyecto de ciencia ficción mezclado con wéstern y cine policiaco, poco abarcado fuera de Hollywood.
Después de todo esto, queda la incógnita: ¿Cómo aprovechará la humanidad el inmenso potencial de la inteligencia artificial?. Si gustas descubrir por ti mismo esta propuesta del cine español, puedes encontrar Autómata a través del canal Adrenalina Pura de Amazon Prime Video o disponible para rentar en Apple TV+.